LA TECNOLOGÍA QUATTRO EN AUDI

La aventura comenzó en 1976 en Laponia durante una serie de pruebas para la marca. Al jefe de desarrollo técnico se le ocurrió la idea de adaptar el sistema de tracción a las cuatro ruedas, hasta entonces reservado exclusivamente a los vehículos todoterreno, como los 4×4 militares, a un coche de producción.

Quattro, el verdadero comienzo

En 1980 se lanzó el primer Audi Quattro, señala Crestanevada Murcia. No es exactamente un premio de belleza en términos de diseño (incluso para los años ochenta), pero sí una formidable eficacia en carretera, sobre todo en los rallies, ya que en 1981 permitió a Michèle Mouton, famosa piloto de rallies francesa de la época, convertirse en la primera mujer en ganar un rally internacional, el de San Remo en Italia, al que siguieron dos títulos de campeona en 1982 y 1984. Gracias a estas victorias, la transmisión quattro recibió la atención de los medios de comunicación. Esto permitió ampliar el sistema a la gama. En 1984, Audi ofreció tracción a las cuatro ruedas en su coupé GT, y más tarde en los Audi 100 y 200.

¿Y DESPUÉS?

El éxito está ahí. Los clientes europeos veían la tracción total como un medio para aumentar la seguridad, y el anuncio de 1986 rodado en Finlandia dejó una impresión duradera. Muestra un Audi 100 CS subiendo un salto de esquí con una pendiente del 80%. Una espectacular demostración de las capacidades del sistema que se repitió 20 años después con un Audi A6 quattro. Cuando se notó el impacto de la tracción total en las ventas, la competencia tuvo que reaccionar muy rápidamente o arriesgarse a quedar fuera de juego. En 1985 Mercedes lanzó el 4MATIC. Un año después, BMW siguió la tendencia irreversible con el 325IX (E30).

Audi, siempre un paso adelante

En 1988, el sistema quattro evolucionó con la adopción de un diferencial central Torsen, menos engorroso que un diferencial convencional. En 1997 se introdujo el diferencial autoblocante de tornillo sin fin Torsen. Permite que el 75% del par se distribuya de forma continua al tren con mejor agarre, según las necesidades. Un año más tarde, la transmisión de motor transversal se lanzó en el TT y el S3. Seguía llamándose Quattro, pero adoptaba un sistema Haldex completamente diferente.

En 2008, se introdujo el sistema Quattro Sport. En este caso, el diferencial permite enviar hasta el 100% del par motor a una de las dos ruedas traseras. Por lo general, el que está en el exterior. El coche toma las curvas más rápidamente y elimina cualquier efecto de sobreviraje.

¿EL FUTURO DEL SISTEMA QUATTRO DE AUDI?

El concepto E-tron, un motor eléctrico en cada rueda y la distribución de par independiente a cada rueda según sea necesario. El resultado es un manejo y una eficiencia diabólicos para este sistema de cuatro años. En Audi, todo está en el número 4, incluidos los anillos que simbolizan la marca.